lunes, 14 de junio de 2010

Unplugged

Estimados, les comparto un comentario que vi en el foro de DirectorDeAlabanza.com, el cual me hizo reflexionar bastante sobre la alabanza y adoración que ofrecemos en nuestras iglesias. Espero que sea de bendición para todos uds. así como lo fue para mí.

Un abrazo grande!!

Escrito por Jesus Eduardo Hidalgo Alamilla, de México:

"Les quiero contar algo que nos paso en la congregación el domingo pasado... Resulta que como de costumbre, llegamos temprano a la congregacion (8:00 AM, la reunion inicia a las 10:00PM) y no había energía eléctrica, fuimos a reportarla y nos dijeron que en unos momentos lo arreglaban, y efectivamente, llegaron los técnicos y se pusieron a arreglar el transformador de la calle.

La cosa es que pasaban los minutos y nada, nosotros conectamos todo, y nos pusimos a orar, confiados en que para las 10:00 AM ya habría luz. Y llegaron las 10 y nada!!! no había luz!!! Hacia un calor!!!!! Los que vivimos en el sureste de Mexico sabran muy bien de que les hablo (a 40°C aprox estos ultimos dias), y ya todos acostumbrados al aire acondicionado, y la gente llenando la iglesia, eso era un sauna!!!!!

Ya pasaban de las 10 y me dice mi pastor, "dale, vamos a empezar", y agarro la guitarrita acústica y el resto del grupo se formo como un coro y a darle!!!

Mi voz no se oía en la iglesia, solo me escuchaban los adelante, asi que nada más podia decirles a los muchachos del grupo, "vamos a cantar esta", "el coro", "La estrofa", etc, pero llego un momento en que toda la gente comenzo a adorar al Señor con sus voces, la música era la que ellos mismos producían con sus voces, manos, algunos panderos, otros con banderas y mantos, unos danzando (o bailando, como gusten llamarle) etc, etc, y se desato una adoración de la cual, estoy convencido que el Padre se agrado mucho, ya que no habia una canción, o un patron que seguir, simplemente la adoración que el Espíritu nos iba guiando.

Tampoco les voy a decir que entramos en un éxtasis y que perdimos el conocimiento y llegamos al tercer cielo! no, estabamos empapados del sudor, era molesto, pero aún asi eso no importaba, la iglesia adoraba con pasión sin importar si habia o no música, o si habia o no aire acondicionado.

Fue una experiencia muy hermosa que me hizo reflexionar como a veces estamos tan acostumbrados a depender de ciertas cosas, aún de la música y los instrumentos, para determinar nuestra adoración al Señor. Me hizo recordar que la iglesia de los primeros cristianos no tenia guitarras eléctricas, ni bateria, ni aire acondicionado, ni micrófonos, pero lo que sí tenian era un corazón lleno de pasión por el Señor.

Bendiciones!"

1 comentarios. Me encantaria conocer tu opinión:

Lai 2 de febrero de 2011, 16:31  

Me encanta..Dios derrama de su espiritu de una manera sobrenatural!

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